La Morros

En todos los lugares hay gente maja y gente menos maja.

Yo creo que en cualquier trabajo que suponga cuidar a la gente, el porcentaje de "gente maja" debería tender al 100%. En un hospital especialmente, ya que las personas no están, no estamos allí por gusto ni elección propia.

De hecho, si estáis en uno y podéis, huid en cuanto os sea posible!

En fin, en la planta de Alto riesgo de Hospitalia los trabajadores son bastante majos, así en general. 

Hay algunas personas excepcionales, profesionales y amables y cuando en un turno les toca trabajar a ellos, respiras tranquila; el resto, la mayoría son, como mínimo, agradables.

Hay excepciones, y otros son desconsiderados, chapuceros, agrios y poco profesionales.

La Morros es el paradigma de todo eso.

La Morros es una enfermera que debería estar jubilada, y encarna todos los defectos y las peores características de una persona en general, y de una enfermera en particular.

Su aspecto es así. Más o menos.

Le importan un pimiento las pacientes, es impertinente y maleducada hasta resultar despectiva. Equivoca las medicaciones (dos de las tres veces que me ha pasado a mí, ha sido ella), si la llamas por la noche enciende todas las luces de la habitación (sea la hora que sea) y se va sin apagarlas... 

Muestra esa actitud entre el hastío y la vileza absoluta, que nadie debería tener en el trato con personas enfermas.  O con personas, punto.

Sólo espero que si acaba en una residencia, le den el mismo trato que ella da a las pacientes de aquí.