Queda un día para que me retiren el Tractocile/ Atosibán. Cuando cumpla la semana 34 (es decir, mañana). Se supone que a partir de esa fecha la medicación ya no es efectiva, y además el bebé es viable, así que ¡fuera Tractocile, fuera vía, fuera todo!
Bueno, en realidad mañana domingo aún lo llevaré, y me lo retirarán el lunes.
Lo que me han dicho los médicos es que me pondrán un tratamiento de progesterona y me tendrán en observación a ver qué pasa, hasta el viernes (así de paso en esa semana me hacen los análisis y la eco del tercer trimestre, aprovechando que ya estoy aquí)
Pueden pasar dos cosas:
a) Que empiece con contracciones, me ponga de parto y fíjate, pues ya que estoy en el hospital, pues doy a luz y ya está.
b) Que no empiece con contracciones, que esté estable y me manden para casa. y que cuando me ponga de parto en casa, me venga para aquí - preferentemente rapidito, por aquello de que no tengo cuello de útero y eso - y ya está.
Y ahora es cuando experimento una sensación muuuuuy rara: después de tantas semanas aquí, de tener tantas ganas de salir... ahora me da miedo.
Quiero irme, claro, pero a la vez no quiero.
Estoy cansada de muchas cosas de Hospitalia: de la comida, de los horarios absurdos, de los controles a todas horas (temperatura, tensión, monitores...) , de levantarme - solo para ir al baño - arrastrando la bomba, de ver solo las caras de la gente de aquí, de estar encerrada, de no poder sentir el sol y el aire más que por la ventana, del ruido constante del aire acondicionado, de no poder ducharme en condiciones, de compartir habitación y no tener nunca intimidad...
Pero ahora que estamos tan cerca de la meta... ¿irme?
Si aquí he pasado de la semana 24 a casi la 34... ¿por qué no a la 35, o la 36 o 37? ¿Por qué no esperar a que mi dragoncita esté más "hecha", que pase el tiempo suficiente y coja peso, y no sea prematura?
¿Y si me voy y me pongo de parto al día siguiente, solo por el movimiento de salir del hospital para ir a casa?
¿Y si no sé reconocerlo, o lo hago tarde, y no llego a tiempo?
Recuerdo cuando entré, me sentía muy asustada pero a la vez más valiente que ahora, incluso les propuse que me dejaran ir a casa enchufada a la bomba de infusión y estar de reposo allí (aún recuerdo lo que se rieron)
Y ahora me veo más dócil, o más adaptada, o a lo mejor mucho más asustada que entonces, quizá por la cercanía del final.
Así que me siento víctima de una especie de Síndrome de Estocolmo Hospitalario que no sé muy bien cómo llevar.
No quiero irmeeeeee...
Bueno, sí: paso a paso. Primero tenemos que llegar a la 34 - que es ya mismo -, y luego... a ver qué pasa!
La verdad que da cosica... Yo pasé poco tiempo en el hospital, pero cuando me dieron el alta, con el pesario, y me vine a casa, recuerdo que al principio, todo eran inseguridades y miedos, y es que, en el hospi, aunque sea un verdadero coñazo, vas super controlada. Pero no te preocupes!! Verás como va todo como la seda :) No te queda nada de nada!! Yo hago 29 la semana próxima, pero, la verdad, me encantaría estar en la 34. Por cierto, te han dicho cuando te quitarán el pesario? Muchos besicos y ánimo guapa!! Estas a un paso de tener a tu niña en brazos :) (Por cierto, no se si lo he comentado, soy Laprilo)
ResponderEliminarHola Laura!
ResponderEliminarSí, ya caí en que eras Laprilo ;)
Ojalá tengas razón y vaya todo bien, aún no me lo han quitado y ya estoy pendiente de si tengo alguna contarcción más, de que si me molestan más que antes... ¬¬
La 29 está muy bien! Primero la 29, y en nada estás en la 30, que con un 3 delante se ven las cosas de otra manera.
El pesario me lo quitarán al hacer la semana 37 (eso dijo el jefe de planta, que según el día es un optimista :)), y si no llego, dice que al ponerme de parto se retira y no hay problema.
Ains, qué nervios todo!
¿Vas bien con tu reposo relativo y con lo del azúcar? Espero que sí. Besicos!